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Esta divertida penitencia se realizará por parejas, es un reto de mucha exigencia, sobre todo en juegos, fiestas y actividades recreativas o dinámicas grupales donde los jugadores o participantes tienen que moverse mucho por el espacio de juego.
La idea es la siguiente, se le dice al jugador que paga la penitencia: Tienes un compañero siamés, que será el jugador de tu izquierda (o lo escogen según estén organizados), por eso deben permanecer pegados por la nalga hasta tu próximo turno.
Los dos jugadores quedan entonces pegados, deben moverse juntos durante un rato, por lo menos 10 minutos. Si se despegan antes, ambos pierden y pagan una nueva penitencia.
Para hacer mejor la unión, los demás pueden buscarse algo para atarlos, como una cuerda o pedazo de tela, pero sin maltratarlos.
Esta prueba sirve para fiestas infantiles, actividades de integración, dinámicas grupales y fiestas para adultos
VARIANTE
En una competencia por equipos, se pueden organizar algunos concursos para ser desarrollados por estos inseparables siameses. Por la manera como tendrán que jugar, apoyándose mutuamente, podemos considerar esta actividad, como un juego cooperativo.
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